Quim Torra e Isabel Díaz Ayuso, los presidentes de las dos comunidades autónomas más afectadas por el coronavirus, han dado positivo en las pruebas de Covid-19.
El presidente de catalán ha cargado contra la constitución y ha culpado al Gobierno de España de no haber sabido hacer frente a la crisis. Por su parte la presidenta de la Comunidad de Madrid ha declarado que seguirá trabajando con normalidad, y ha aprovechado para animar a la población a que estén «tranquilos» porque «saldremos de esta todos juntos».
Quim Torra pide el confinamiento solidario pero no pone ninguna medida
Quim Torra ha declarado que si «Cataluña tuviera más competencias esto no habría pasado». Actualmente se encuentra atendido por el equipo médico de la Generalitat en la Casa dels Canonges, unas estancias adyacentes al Palau de la Generalitat.
Torra se suma a Pere Aragonès, coordinador general de ERC, quien recientemente se había reunido con políticos presos, quienes han regresado a la cárcel sin pasar la cuarenta.
El president de la Generalitat ha advertido a la población de los peligros que supone permanecer en el espacio público y ha dado orden a los Mossos (cosa que ya había hecho el Gobierno de la Nación) de multar a todos aquellos que transiten por la calle sin causa justificada:
Madrid suma 621 nuevos contagios hasta un total de 4.165 infectados
Madrid continúa siendo la comunidad con más casos de infección por Covid-19. Con los 621 nuevos casos detectados esta tarde ya suman un total de 4.165. El Estado ha decidido contratar a médicos jubilados hasta 70 años y a médicos que hayan aprobado el MIR aunque no dispongan de plaza. Alegan que la situación es de máxima urgencia. También han confiscado todo el material médico que esté en anos públicas o privadas, así como las instalaciones de los hospitales privados por «urgencia médica nacional».
España está evolucionando mucho peor de lo que lo había hecho Italia cuando la situación se encontraba en un estadio similar.
Cuando Italia tuvo los 10 primeros casos su curva de aumento de nuevas infecciones fue sensiblemente menor, más lenta. Si las previsiones se cumplen España podría disparar sus casos hasta las 1500 muertes en apenas seis días.
